Conocidas como aftas o úlceras bucales, las llagas son lesiones dolorosas que se forman en el interior de la boca. Lo cierto es que suelen ser inofensivas y desaparecer por sí solas con el paso del tiempo, pero pueden llegar a resultar bastante molestas y afecta a la calidad de vida de quien las padece. En este post te hablamos de sintomatología, posibles causas y tratamientos disponibles para abordar esta patología. ¡Vamos allá!
Síntomas de las llagas
Si alguna vez has tenido una llaga bucal, probablemente sepas cómo son. Si no, vamos a explicártelo a continuación. Se presentan como unas pequeñas úlceras blancas o amarillentas rodeadas por una zona roja e inflamada. Aunque pueden formarse en cualquier parte de la boca, lo más común es que aparezcan en el interior de los labios, en las encías, en el paladar y en la parte interna de las mejillas.
Los síntomas más frecuentes de las llagas son:
- Dolor al comer o beber alimentos calientes, picantes o ácidos, así como al cepillar los dientes.
- Sensibilidad en la zona afectada, sobre todo, al taco, causando dificultad al hablar o mover la boca.
- Sensación de ardor o picazón antes de que aparezca la llaga.
- Problemas para comer, masticar y tragar alimentos si están ubicadas en áreas más sensibles.
Causas de las llagas
La causa exacta de las llagas no está comprobada, pero es cierto que existen diferentes factores de riesgo que favorecen su aparición:
- Lesiones o traumatismos: morderse la mejilla o el labio, llevar un aparato que esté mal ajustado o cepillarse con demasiada fuerza pueden causar la formación de llagas.
- Estrés: situaciones de estrés o ansiedad pueden debilitar el sistema inmunológico, aumentando la probabilidad de desarrollar llagas.
- Deficiencias nutricionales: la falta de vitaminas y minerales esenciales como el hierro, el zinc, el ácido fólico o la vitamina B12 también puede contribuir a la aparición de llagas.
- Cambios hormonales: las mujeres son más propensas a sufrir llagas debido a los cambios hormonales sucedidos durante determinados períodos de su ciclo menstrual.
- Infecciones bacterianas: por último, en algunos casos, las llagas pueden aparecer por infecciones bacterianas producidas en la boca.
Tratamiento para las llagas
Como indicábamos al inicio de este post, la mayoría de las llagas desaparecen solas en una o dos semanas, sin necesidad de tratamiento. Sin embargo, existen medidas que pueden ser tomadas para calmar las molestas sensaciones y acelerar el proceso de curación:
- Enjuagues bucales con soluciones salinas o antisépticas ayuden a reducir la inflamación y aliviar el dolor.
- Analgésicos tópicos en formato gel o crema para reducir las molestias.
- Evitar alimentos o bebidas calientes, picantes o ácidos que puedan ser irritantes.
- Llevar a cabo una higiene oral minuciosa.
- Incluir suplementos nutricionales vitamínicos o mineras bajo supervisión médica.
Si las llagas duran más de dos semanas, te animamos a acudir a tu clínica dental de confianza. En Agudo Rosa contamos con un equipo de odontólogos generales que se encargarán de estudiar tu caso y ofrecerte la mejor solución.
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